La adaptación de un niño de 2 a 3 años a una escuela infantil dependerá más de la actitud del personal docente y de los cuidadores que del propio niño. Aunque tú se lo hayas dicho, tu hijo no se dará cuenta de lo que significa ir a la escuela hasta que haya probado la experiencia. El personal de la escuela estará preparado para recibirle y facilitarle la adaptación en los primeros días. Además, este trabajo de adaptación debe ser compartido con los padres del niño.
Actitudes de la educadora
- Aproximación. Al encontrarse con el niño: aproximación, respeto y afecto, sin ansiedad ni agobio.
- Conocimiento del nombre del niño con anterioridad a su llegada a la escuela.
- Creación de un clima de seguridad afectiva individual y colectiva.
- Tranquilidad ante manifestaciones de inadaptación del niño (rabietas, llantos, inapetencias), pero sin abandono.
- Atención individualizada (pero no exclusiva) sobre todo, en los momentos cotidianos de: llegadas, despedidas, comidas; entendiéndolos como momentos de gran importancia para la relación individual-afectiva con el niño (tratando de evitar prisas, agobios o nervios).
- Conocimiento del niño a través de: entrevista con los padres, observación del niño y de sus reacciones ante situaciones cotidianas de la escuela.
Adaptación al grupo
- Actividades. En la medida que se va adaptando, la educadora organiza actividades para que el niño se ponga en contacto con el resto del grupo: conocimiento de los nombres de los otros niños.
- Etapas. Conocimiento de la etapa evolutiva por la que atraviesa el niño, entendiendo el egocentrismo característico de esta etapa, ayudándole a superarlo por medio de actividades grupales -que aprendan a compartir el material- (no todo es mío) - que aprendan a cuidarlo y recogerlo.
- Emociones nuevas. La educadora intentará que el niño canalice su agresividad en situaciones de compartir, buscando fórmulas alternativas (no le quites este juguete a tu amigo, toma otro del estante).
- Conducta. La conducta agresiva del niño debe entenderse como una forma de relación normal en esta edad y más en el periodo de adaptación. Este límite se debe poner por parte de la educadora de una forma no agresiva y sin tensiones, al igual que el resto de los límites.
Adaptación al nuevo espacio
- Conocimiento del espacio-clase: objetos, adornos, muebles.
- Conocimiento del material.
- Conocimiento del aseo.
- Conocimiento del patio.
- Conocimiento del comedor.
- Conocimiento de la enfermería.
Relación con los padres
- Dar confianza y seguridad a los padres.
- Entrevistas (también como forma de conocer a los padres y ver la relación que tienen con sus hijos).
- Las entradas y las salidas deben ser lo menos conflictivas posibles: paciencia con los padres.
- Recomendaciones y límites claros a los padres desde el principio (puntualidad, ropa marcada, que ahora al principio no entren mucho en las clases) evitando los enfrentamientos.
Nota: Explica siempre a tu hijo todas las situaciones nuevas que vaya a vivir: situaciones cotidianas, actividades, entrada, salida, jardín, comida o siesta.
Fuente:guiainfantil