En este artículo veremos la importancia de saber decir no a los hijos para que aprendan a conocer sus límites a tiempo y ganen en autoconfianza.
. La importancia de los límites para la educación de tus hijos
Nuestra labor como padres es la de delimitar reglas claras de conducta, límites, que ayudarán a los niños a guiarse por la vida seguros y confiados.
Hay una imagen clara que ejemplifica cómo se siente un niño que crece sin límites claros: imagínate nadando en el medio de un océano, en un lugar desde donde no atisbas tierra por ningún lado. No sabes hacía dónde dirigirte. Miras hacia un lado, miras hacia otro y todo te parece igual.
No sabes qué hacer... Esa misma ansiedad y sensación es la que experimentan los niños que no tienen reglas claras en su vida.
Imagínate por el contrario que estás en la misma situación, pero con la diferencia de que hay unos carteles indicadores que te ayudan a seguir y llegar a tierra segura.
El triángulo de responsabilidades
Imagina un gran triángulo, en el que en la base hay poca libertad, pocas elecciones posibles y poca responsabilidad y según vamos subiendo hay cada vez más libertad, más elecciones y más responsabilidad. Esto ese equivalente a cómo ha de ser la educación de nuestros hijos.
Siempre que respetemos este ritmo de crecimiento los niños se van a sentir respetados, seguros y dignos de confianza. En muchas ocasiones, sin embargo, este triángulo se invierte dándole a los niños demasiada libertad, responsabilidad y opciones demasiado pronto en la vida.
¿Resultado?: dado que han tenido padres sin saber decir no, que les han dado demasiada libertad y falta de límites desde una edad temprana, no aceptarán fácilmente cuando tengan que cumplir estos u otros límites más adelante en su vida convirtiéndose en personas con poca tolerancia a la frustración, rebeldes, y enfrentados a los adultos que les rodean.
La importancia de la constancia
Ya hemos hablado de la importancia de crear reglas claras que ayuden a los niños a crecer seguros. Pero ¿por qué hay tantos niños hoy en día que desobedecen y se saltan las normas con frecuencia?.
¿Cuántas veces nos hemos saltado una regla impuesta por nosotros mismos cediendo ante la insistencia de nuestros hijos por no saber decir no?
Un bebé, de un año, quiere coger algo que tú no le permites coger, por ejemplo un frágil adorno del salón. Él insiste en tratar de cogerlo. Unas veces, porque estás haciendo otra cosa o porque estás cansada lo dejas pasar. El niño entiende que si insiste un poco podrá obtener lo prohibido, con lo cual no está tan prohibido... O bien llora por la noche para que vayas a verle (sin que haya una razón real que lo justifique) y tú, unas veces no vas, pero otras sí.
El mensaje que le das al niño es: "Si quieres algo has de insistir mucho para conseguirlo" y también "los límites no están claros, aquí también mandas tú."
En este caso los límites no quedan claros y crean confusión y estrés en el niño. Cada vez que se enfrente a un nuevo límite lo que hará (ante tu incapacidad de saber decir no) será precisamente eso: llevarte hasta el límite!!!
Su insistencia no puede ser superior a tu firmeza
Pongamos otro ejemplo: estamos en el supermercado y de repente tu hijo de 10 años te pide que le compres un cochecito de juguete que está de moda en ese momento. Tú le dices que no y sigues caminando (con anterioridad les has enseñado a que no pidan cada vez que ven algo)
Al poco rato tu hijo se enfada: "Jo, pues fulanito y menganito lo tienen" Estoicamente tú sigues caminando y finges no escucharle y así al poco insiste, se enfada, te dice que eres mala con él y bla, bla, bla y finalmente cedes y se lo compras con la única esperanza de que se calle y deje de montarte el numerito delante de la gente.
¿Qué crees que harán esos niños la próxima vez que quieran conseguir algo que saben que no está permitido?. O bien lo harán sin más (desobedeciendo), o bien insistirán cada vez más y más para ver hasta dónde llega tu límite. Saber decir no es importantísimo.
Hazles un favor a tus hijos
Déjales claros qué es lo que está permitida a cada edad y qué es lo que definitivamente no lo está. Responsabilízales en función de su edad y vete dándoles más libertad a medida que su ritmo evolutivo lo demande.
Realmente saber decir no y ponerles límites es el mejor regalo que podemos hacerles.
Fuente:enbuenasmanos
Como sea el desarrollo psicomotor del niño condicionará su capacidad de relacionarse con su entorno y tambien afectará a su coordinación y aprendizaje.
. A través del movimiento exploramos y experimentamos con el mundo que nos rodea y así conocemos los límites de nuestro cuerpo y nuestras capacidades. Éste conocimiento nos proporciona autonomía y por lo tanto seguridad y autoestima.
Es indispensable un buen conocimiento del entorno y de nuestro propio cuerpo para poder entender y realizar lo que conocemos como abstracción y representación, es decir, la capacidad de plasmar en un papel lo que vemos, decimos, oímos y sentimos (el dibujo y la lecto-escritura)
El desarrollo psicomotor está formado por una serie de aprendizajes que el niño realiza a través del movimiento.
Desarrollo psicomotor y movimiento
El movimiento humano no es solo el resultado de la contracción de algún músculo, sino que es un acto voluntario orientado a un fin determinado, con un objetivo, algo planificado e intencionado.
Este objetivo está situado en el medio que nos rodea, así que la motivación del movimiento dependerá de los estímulos que nos proporcione el entorno.
Nos movemos porque queremos conseguir algo que nos interesa de nuestro alrededor, persona u objeto. Lo queremos y ponemos en marcha los mecanismos necesarios para llegar hasta él.
Nosotros, como adultos, sabemos de forma automática cuáles son estos mecanismos, (para levantarme de la silla tengo que estirar las rodillas y adelantar el cuerpo, para no caerme hacia atrás) Lo sabemos porque nos hemos levantado muchas veces y lo hemos automatizado, es decir no tenemos que pensar antes de hacerlo.
Importancia del cuando y como aprendemos, en el desarrollo psicomotor
A lo largo de los primeros años de vida a través de la experimentación con nuestro cuerpo y con nuestro entorno.
La primera vez que el bebé consigue realizar un movimiento es por casualidad. A partir de aquí se da cuenta de la posibilidad y lo vuelve a intentar, y lo repite infinidad de veces hasta que lo domina. Es decir, hasta que tiene grabado en su cerebro la forma de hacerlo y por lo tanto pasa a ser algo automático. Así aprendemos absolutamente todo a lo largo de nuestra vida, a través de la práctica, incluso de adultos.
Cuando estimulamos y ayudamos al niño en su desarrollo psicomotor lo que hacemos no es esperar a que intervenga el azar, sino que le ayudamos nosotros a descubrir sus posibilidades.
Pongamos un ejemplo: un bebé tiene un juguete al lado que no le llama la atención, es un sonajero. Puede ser que lo vea pero no le atraiga, no le interese. Por casualidad le da un golpe y suena. Ahora si que le interesa y lo intenta hacer sonar otra vez, a veces lo consigue y a veces no, lo hace sonar hasta que aprende como tiene que moverlo para obtener el sonido. La próxima vez que le enseñemos el objeto lo hará sonar a la primera porque ya ha aprendido.
Ha hecho un aprendizaje cognitivo-motriz. ¿Y si en vez de dejarlo a su lado le enseñamos que suena para que se interese por el antes? Tal vez ese golpe fortuito tarda en llegar.
Nosotros, como parte del entorno, podemos influir en el desarrollo psicomotor del niño, ayudándole y favoreciendo que sea armónico y adecuado.
Aprendizaje motriz = Aprendizaje cognitivo
Cada habilidad o aprendizaje motriz implica un desarrollo cognitivo que queda grabado en el cerebro.
Estos aprendizajes tienen lugar en un orden determinado, que es lo que conocemos como desarrollo psicomotor.
El estudio y análisis de estos aprendizajes nos ha proporcionado las tablas de desarrollo psicomotor.
Lo importancia y utilidad de las tablas de desarrollo psicomotor radica en que nos proporcionan el orden en que se adquieren los aprendizajes, el orden necesario para un desarrollo psicomotor armónico y adecuado. Es tan importante si el niño hace lo que le corresponde según su edad, como si ha realizado todos los aprendizajes previos a la edad cronológica. El que un niño pueda caminar no garantiza un desarrollo psicomotor adecuado sino sabe voltear, rastrear o gatear ya que su equilibrio, coordinación, su orientación en el espacio y el tiempo, su esquema corporal, etc. no serán correctos y los necesitará más adelante, para adquisiciones posteriores como son el dibujo y la lecto-escritura.
Los aprendizajes no se dan en un orden aleatorio, sino que el primero condiciona al segundo, pero también al décimo. Imaginemos que el cerebro de un niño es un libro en blanco que vamos escribiendo con cada aprendizaje que realiza. Si nos dejamos algún capítulo por escribir, es probable que nos falte información para entender el argumento completamente.
Es en este punto donde la intervención a tiempo puede ayudar al niño en aquellos aspectos del desarrollo psicomotor que no ha aprendido por si solo. La capacidad del niño para aprender decae a medida que crece y resulta más difícil corregir aquellos aprendizajes que se han adquirido de forma incorrecta.
Las capacidades motrices y psíquicas no son inmediatas ni programadas, no surgen de forma espontánea en un momento determinado del desarrollo, sino que surgen como el resultado de un largo y complejo proceso de aprendizaje y además son dependientes entre ellas
Fuente:enbuenasmanos
Si tu niño tiene 3 años, o está próximo a cumplirlos, no te alarmes si empieza a hablarle al vacío, o a decirte que alguien está jugando con él y no ves a nadie. Es parte de una etapa que suele durar hasta aproximadamente los 8 años de edad. Los temores a seres irreales también suelen aparecer en esta etapa, cuando empiezan a relacionarse con otros niños y experimentan situaciones nuevas. El amigo imaginario les ayuda a percibir y aceptar el mundo real, mediante la imaginación y fantasía.
Sus temores, anhelos y deseos serán expresados a través de un amigo imaginario o un muñeco. De repente volcará en su amigo las necesidades que tiene, por lo que tu actitud no debe ser de preocupación, ni hacerle sentir que está mal o es raro que no hable con nadie. Notarás también que tus hijos le hablan a su amigo de la forma cómo lo regañan o felicitan o le hablan a él.
¿En qué ayuda a los niños el amigo imaginario?
Les ayuda a liberar emociones.
Les ayuda a canalizar sus miedos en situaciones nuevas para ellos.
Los preparan para aceptar nuevas situaciones.
Aprenderán a controlar sus emociones.
Cuándo preocuparse:
Si notan características violentas en el amigo imaginario.
Si el niño no quiere socializar con otros niños y se retare para estar solo con la compañía de su amigo imaginario y le impide realizar actividades de la vida cotidiana.
Si el niño teme al amigo imaginario.
¿Qué pueden hacer los padres?
Obsérvalo. Aprenderás a conocer mejor los sentimientos de tu niño observando qué hace y qué le dice a su amigo. No lo regañes ni le llames la atención por tenerlo.
Pasa más tiempo con tu niño. Juega con él.
Presta atención a sus necesidades y temores.
Bríndale confianza, animándolo a hacer las cosas mejor.
Ten paciencia si algo no le sale o no le gusta. .
Si van a tener cambios, en casa, colegio, embarazo, prepáralo. Poco a poco anticípale qué va a suceder después.
Obsérvalo. Sobre todo ten presente a los héroes y súper héroes en los que tu niño se quiere convertir (y saltar, volar o imitar sus acciones. Tu supervisión evitará accidentes)
Fuente:cosasdelainfancia
El reflejo de succión es un reflejo innato que manifiestan los bebés; empieza desde antes de nacer y dura aproximadamente hasta los dos primeros años de vida. El reflejo de succión logra que la mamá produzca la cantidad de leche que el bebé necesita. La succión además de ser importante en el aspecto nutricional, también lo es en el afectivo, debido a que el bebé asocia este estímulo con la cercanía de mamá, así como dormir.
Cuando los bebés cogen un objeto, lo exploran llevándolo a la boca. Sucede que las mamás, al ver a sus bebés haciendo esto o chupándose el dedo, inmediatamente les compran un chupón, muchas veces desconociendo que no es recomendable su uso.
¿Por qué no se recomienda el uso del chupón?
Puede llegar a producir alteraciones en la mordida. (Maloclusión dental)
Mala succión al lactar. La succión del chupón no es la misma que la de succionar para alimentarse con leche materna.
Portador de bacterias. Ocurre que a veces cae al piso y el bebé puede llevárselo a la boca nuevamente.
Podría producir accidentes. Si se cuelga del cuello del bebé para evitar que caiga al piso, el bebé como jugando podría enredarse con la cinta que sostiene su chupón.
¿Cómo puede dejar el chupón el bebé?
Realiza un trueque al cambiarlo por un juguete especial.
Que sea gradual. Dejar que use el chupón por ejemplo sólo para ciertas ocasiones.
Una vez que lo haya dejado hacer el compromiso personal de no volver a dárselo.
Cuando el bebé no ha usado chupón
Si su bebé nunca ha usado chupón, no le de uno, pues no es necesario. Tenga en cuenta que no es recomendable pues presenta más desventajas que cosas favorables
Las situaciones de duelo en la infancia son parte de la estructuración psíquica del ser humano, digamos que el desarrollo, esta lleno de experiencias de ausencia, separación y frustración los cuales son parte imprescindible de la estructuración mencionada, por lo que los niños estarán normalmente familiarizados con estos procesos. Como ejemplos de duelo tenemos; la muerte de un padre, enfermedad grave de un progenitor, divorcio y separaciones.
Sin embargo nos ocupa el tema del duelo patológico, que es cuando ha habido pérdidas significativas a edades precoces, situaciones vitales estresantes (como el paso de tenencia a otro familiar) y/o antecedentes psiquiátricos de algún progenitor. Estos aspectos son de importancia, ya que pueden ser obstáculos en el desenvolvimiento del proceso natural del duelo.
Asimismo entendemos que es un proceso mental de separación y pérdida hasta la restauración del sujeto. Este tiene distintas etapas que a continuación desarrollamos y además señalamos algunas sugerencias de acompañamiento por parte del adulto:
1 Negación.- Puede preguntar (el niño) reiteradamente dónde esta, cuándo viene a pesar de la explicación brindada, también puede crear una fantasía (al no entender adecuadamente la definición de la muerte; por lo cual hay reiterar la explicación con claridad, empleando ejemplos de la vida natural, comúnmente en niños menores de 5 años).
También puede ser útil describir al detalle; cuando uno muere ya no respira, no come, no se mueve, no duerme, para eliminar la fantasía del dormir o que en algun momento regresará
2. Desorganización.- Es bueno que los niños no se les aparte del dolor familiar, sin embargo se les puede proteger de ver escenas de desorganización extrema. Es buena idea que participe cuando ya ha pasado la etapa más difícil en el ámbito adulto, pudiendo participar (no obligadamente) en los rituales fúnebres e incluso ver el cadáver con las explicaciones mencionadas líneas arribas si es necesario. A veces los niños tienen (al no tener contacto con sus emociones concientemente), síntomas somáticos como falta de apetito, problemas de sueño, dificultades en la escuela y ello suele ser temporal, hasta que se asimile y culmine todo el proceso etc
3. Enojo.- Cuando el niño, tiene síntomas de enojo, se espera que lo supere, siempre y cuando lo conecte con los hechos reales de la perdida, en cuyo caso se le acompaña , escucha y se le refleja la verdad, a veces surge la pregunta “porque” y no es negativo mostrar que ni siquiera los adultos tenemos el control y conocimiento sobre las fuerzas de la naturaleza.
En otro caso, puede mostrar conductas violentas fuera de contexto , sugiriéndose atención profesional ( si es que el adulto, no puede devolver a niño la posibilidad y libertad de sentirse molesto. A veces los niños no se permiten sentir muchas formas de expresar su dolor porque no están permitidas como norma de comunicación en la familia / donde no se llora )
4. Culpa.- A veces surge en la mente de los niños la fantasia que de haberse portado mejor no hubiese muerto y una variedad de ideas que pueden ser eliminadas explicando los detalles de aquella condición que determinó la muerte y en este caso el lenguaje que usamos debe ser muy claro, debido a que si decimos que enfermo y luego murió, podría asociarse que todo el que enferma puede morir, se debiera decir frases como. estuvo gravemente enfermo.
La otra medicina es la humildad de reverenciar la vida con sus procesos respetándola, tomándola en un contexto más religioso, de manera que es la medicina contra la culpa, la cual supone que el tiene la suficiente fuerza como para intervenir y condicionar el destino por algo que hizo. A veces los niños rompen su contacto con la experiencia religiosa al sentirse defraudados, producto de no haber incorporado una comprensión sobre el proceso ciclico de la vida
5. Soledad.- El proceso previo a la sanación se ve por el sentir valoración profunda de aquello que antes estuvo allí, de manera que podemos dejar algo en el corazón, como valioso y este sello pasa por esta etapa de tomar el amor de esa persona y sus palabras, honrando su muerte por la fuerza con la que tomamos la vida, “Honro tu muerte con mi vida!¡tomo la vida!, son conceptos que se deben sugerir, cuando ha habido una muerte durante un nacimiento , en un accidente, etc.
En ocasiones cuando no se supera una pérdida en etapa precoz, pueden aparecer síntomas de neuroticismo, conductas desadaptadas, tendencia a la depresión en la vida adulta, rumiación o personalidad suspicaz.
6. Alivio.- Es la etapa donde se estabiliza la mente y crea un vinculo armonioso con la realidad, contruyendo un modelo congruente.
7. Restablecimiento.- El niño puede ejercer las funciones académicas, familiares, sociales, etc, de manera conectada y recuperando en sí mismo la imagen de completitud que de antemano percibió debilitada.
En casos de suicidio y condiciones diversas son también recomendados la asistencia del profesional en salud mental correspondiente.
La identidad se construye en el eje de la comprensión de la realidad, la muerte es parte de ella y podemos facilitar el camino de elaboración del duelo, clave de su éxito si como adultos tomamos una perspectiva más frontal, inteligente y verdadera
La escritura es una actividad perceptivo-motriz.
Desde una perspectiva constructivista y de implementación grafo- motriz se establecen necesidades que no solo dependerán del maestro, sino que depende en gran medida de las habilidades individuales del educando.
El objetivo general del aprendizaje es la construcción de automatismos motrices específicos de la caligrafía correcta como:
la regularidad del tamaño de las letras.
el enlace de las letras (cursiva).
el respecto de distancias iguales entre las palabras.
la legibilidad de las palabras.
una buena velocidad de escritura.
La caligrafía de la escritura incluye:
un aspecto perceptivo: la discriminación de las formas y de las características de las letras.
un aspecto motriz: el acto motor del movimiento de escritura; Intrínseco, se realiza solo por la satisfacción que produce.
un aspecto simbólico: la comprensión de los signos y del contenido del mensaje.
Características previas del desarrollo de la niña o del niño:
Motriz: control de la motricidad fina (destreza y coordinación viso-manual).
Cognitivo: entender el porqué de la actividad gráfica y el aspecto simbólico, tal como el sentido de los signos.
Afectivo: deseo y placer de escribir.
Principios generales:
La caligrafía es un proceso evolutivo por lo cual es bastante difícil distinguir estados de pre-caligrafía, listo para la caligrafía y la caligrafía propia, aunque numerosos autores lo propongan.
Considerar el desarrollo global (motor, cognitivo y afectivo) de los niños y niñas para empezar actividades pre-caligráficas cerca de los 3 ó 4 años.
Las actividades caligráficas tienen que tener un objetivo para los niños (apellido, nombre, palabras).
Favorecer la relación entre la mecánica de la caligrafía y su importancia en la legibilidad de la escritura, acto de comunicación.
Cosas que pensar:
Empezar las letras tan pronto como posible en lugar de los trazos.
Se pueden utilizar lápices de tamaño normal.
Practicar cada día, por algunos minutos, para que el ejercicio no sea aburrido.
Verificar, desde el principio, que la postura sentada y la prensión del lápiz sean correctas.
Es mejor que los aprendices tomen buenas costumbres que corregir las malas, después.
Asociar el ejercicio a algo de significante e importante para la niña o el niño (comunicar).
La escritura:
Motricidad gruesa:
Mantenimiento de la posición sentada apropiada.
Tono muscular adecuado para mantener el tronco derecho.
Cabeza alejada de la mesa (30 cm.), sin contracciones musculares exageradas.
Brazos sobre la mesa.
Motricidad fina:
Elección de la mano preferida.
Agarre del lápiz (control de la fuerza).
Coordinación viso-manual para dirigir el lápiz.
Movimientos básicos (cicloides).
Disociar el brazo del hombro y del cuerpo, la mano de la muñeca, los dedos de la mano.
Eliminar las sincinesias y las contracciones musculares parásitas (labios, lengua, piernas, brazo).
Conclusión
La escritura necesita un aprendizaje sistemático de parte de la niña y del niño, organizado por el adulto.
Es un aprendizaje perceptivo-motor en el cual se necesita la discriminación perceptiva de las letras y la producción de movimientos controlados para automatizarlos.
Distintos aspectos merecen la atención de los profesores: la posición sentada y la postura general, el agarre del lápiz, los movimientos básicos de la escritura script o cursiva, la orientación de la hoja de papel, la elección de la mano de escritura, el guiado del gesto.
No todos los niños logran fácilmente este aprendizaje: distintas formas de dificultades pueden ocurrir, necesitando una forma u otra de reeducación.
El dibujo es una representación gráfica de un objeto real o de una idea abstrata
El dibujo es una de las formas de expresión más antiguas de la humanidad. Se utiliza el dibujo como una forma de comunicación desde la prehistoria, cuando los primeros hombres, a través de pequeñas figuras, dibujadas en rocas y en las paredes de las cuevas, manifestaban sus ideas y pensamientos entre sí. Al principio, usaban los dibujos para comunicarse, para expresar opiniones, ya que todo el mundo era prácticamente iletrado. Los dibujos funcionaban como escritura. Con el tiempo, el dibujo fue ganando nuevas formas, nuevos trazos, y se fue perfeccionando hasta la realidad actual. El dibujo es, por lo tanto, una representación gráfica de un objeto real o de una idea abstracta.
El dibujo y las etapas de los niños
El dibujo es, casi siempre, la primera gran obra de los niños. Representa su primer gran tesoro expresivo ya que, a través de los dibujos los niños dicen muchas cosas de sí mismos. Puede ser que esta sea la razón por la cual muchos padres estén cada día más interesados por los dibujos que hacen sus hijos. El dibujo se puede convertir, en algunos casos, en el termómetro del estado de ánimo del niño, ya que traduce lo que el niño siente, piensa, desea, o lo que a él le inquieta, le hace alegre o triste.
Cada niño es un mundo y eso se ve en sus dibujos. Si pides a un grupo de niños que dibuje a una casita en el campo, todos los dibujos saldrán distintos. Pueden parecerse en algo, pero jamás serán iguales. Además de eso, hay que considerar que los dibujos también siguen algunas etapas que podríamos señalar como:
- La etapa del garabato - de los 3 a los 6 años de edad
- La etapa del esquema - de los 6 a los 9 años de edad
- La etapa intermedia - de los 9 a los 12 años de edad
- La etapa de la reproducción fiel - de los 12 a los 14 años de edad
- La etapa de la representación espacial - a partir de los 14 años de edad.
Psicomotricidad
El dibujo es una actividad espontánea y como tal hay que respetarla y considerarla como la gran obra de los niños. Si el niño tiene ganas de dibujar, anímale siempre a que lo haga. Lo ideal es que todos los niños pudiesen tener, desde la más temprana edad, algún contacto con el lápiz y el papel. Empezarán con garabatos, y luego estarán dibujando formas más reconocibles. Cuanto más dibujen los niños, mejor dibujarán, y más beneficios se notará en su desarrollo. El dibujo facilita y hace evolucionar el niño en:
1- Psicomotricidad fina
2- Escritura y la lectura
3- Confianza en sí mismo
4- Expresividad de emociones, sentimientos y sensaciones
5- Comunicación con los demás y consigo mismo
6- Creatividad
7- Formación de su personalidad
8- Madurez psicológica
En este artículo veremos la importancia de saber decir no a los hijos para que aprendan a conocer sus límites a tiempo y ganen en autoconfianza.
. La importancia de los límites para la educación de tus hijos
Nuestra labor como padres es la de delimitar reglas claras de conducta, límites, que ayudarán a los niños a guiarse por la vida seguros y confiados.
Hay una imagen clara que ejemplifica cómo se siente un niño que crece sin límites claros: imagínate nadando en el medio de un océano, en un lugar desde donde no atisbas tierra por ningún lado. No sabes hacía dónde dirigirte. Miras hacia un lado, miras hacia otro y todo te parece igual.
No sabes qué hacer... Esa misma ansiedad y sensación es la que experimentan los niños que no tienen reglas claras en su vida.
Imagínate por el contrario que estás en la misma situación, pero con la diferencia de que hay unos carteles indicadores que te ayudan a seguir y llegar a tierra segura.
El triángulo de responsabilidades
Imagina un gran triángulo, en el que en la base hay poca libertad, pocas elecciones posibles y poca responsabilidad y según vamos subiendo hay cada vez más libertad, más elecciones y más responsabilidad. Esto ese equivalente a cómo ha de ser la educación de nuestros hijos.
Siempre que respetemos este ritmo de crecimiento los niños se van a sentir respetados, seguros y dignos de confianza. En muchas ocasiones, sin embargo, este triángulo se invierte dándole a los niños demasiada libertad, responsabilidad y opciones demasiado pronto en la vida.
¿Resultado?: dado que han tenido padres sin saber decir no, que les han dado demasiada libertad y falta de límites desde una edad temprana, no aceptarán fácilmente cuando tengan que cumplir estos u otros límites más adelante en su vida convirtiéndose en personas con poca tolerancia a la frustración, rebeldes, y enfrentados a los adultos que les rodean.
La importancia de la constancia
Ya hemos hablado de la importancia de crear reglas claras que ayuden a los niños a crecer seguros. Pero ¿por qué hay tantos niños hoy en día que desobedecen y se saltan las normas con frecuencia?.
¿Cuántas veces nos hemos saltado una regla impuesta por nosotros mismos cediendo ante la insistencia de nuestros hijos por no saber decir no?
Un bebé, de un año, quiere coger algo que tú no le permites coger, por ejemplo un frágil adorno del salón. Él insiste en tratar de cogerlo. Unas veces, porque estás haciendo otra cosa o porque estás cansada lo dejas pasar. El niño entiende que si insiste un poco podrá obtener lo prohibido, con lo cual no está tan prohibido... O bien llora por la noche para que vayas a verle (sin que haya una razón real que lo justifique) y tú, unas veces no vas, pero otras sí.
El mensaje que le das al niño es: "Si quieres algo has de insistir mucho para conseguirlo" y también "los límites no están claros, aquí también mandas tú."
En este caso los límites no quedan claros y crean confusión y estrés en el niño. Cada vez que se enfrente a un nuevo límite lo que hará (ante tu incapacidad de saber decir no) será precisamente eso: llevarte hasta el límite!!!
Su insistencia no puede ser superior a tu firmeza
Pongamos otro ejemplo: estamos en el supermercado y de repente tu hijo de 10 años te pide que le compres un cochecito de juguete que está de moda en ese momento. Tú le dices que no y sigues caminando (con anterioridad les has enseñado a que no pidan cada vez que ven algo)
Al poco rato tu hijo se enfada: "Jo, pues fulanito y menganito lo tienen" Estoicamente tú sigues caminando y finges no escucharle y así al poco insiste, se enfada, te dice que eres mala con él y bla, bla, bla y finalmente cedes y se lo compras con la única esperanza de que se calle y deje de montarte el numerito delante de la gente.
¿Qué crees que harán esos niños la próxima vez que quieran conseguir algo que saben que no está permitido?. O bien lo harán sin más (desobedeciendo), o bien insistirán cada vez más y más para ver hasta dónde llega tu límite. Saber decir no es importantísimo.
Hazles un favor a tus hijos
Déjales claros qué es lo que está permitida a cada edad y qué es lo que definitivamente no lo está. Responsabilízales en función de su edad y vete dándoles más libertad a medida que su ritmo evolutivo lo demande.
Realmente saber decir no y ponerles límites es el mejor regalo que podemos hacerles.
Fuente:enbuenasmanos
Ayuda a tu hijo a que supere los terrores nocturnos y las pesadillas
Nuestra mente no para aunque estemos durmiendo. Durante el sueño, continuamos organizando informaciones, asimilando imágenes, recuerdos y pensamientos, en nuestra memoria. En el sueño no hay límites de conciencia. Tanto podemos encontrar la solución a algún problema o una vía de escape a una situación difícil.
En el caso de los niños esos problemas pueden estar relacionados, en su mayoría, con los hábitos irregulares de dormir o con la ansiedad de irse a la cama y quedarse dormidos. En su primera etapa de desarrollo infantil, la hora de acostarse representa la hora de la separación. Y es cuando aparecen los problemas durante el sueño infantil.
Pesadillas de los bebés y niños
Por lo general, las pesadillas empiezan a los dos años aunque sean mas comunes en niños de tres a seis años de edad. No se sabe la causa, pero dicen que están relacionadas con el estrés y la ansiedad de los niños.
Las pesadillas ocurren durante el sueño ligero. Y su frecuencia es muy relativa. Hay niños que las tienen muy seguidas, otros menos, y otros no llegan a tenerlas. En la mayoría de los casos los padres no se deben preocupar por eso. Lo importante es saber que es lo que debe hacer en el caso de que su hijo la tenga. Aquí tenemos algunas sugerencias:
Prevención: Los padres deben estar atentos a lo que miran sus hijos en la tele, especialmente antes de la hora de irse a dormir.
Estar preparados: Como las pesadillas no se pueden evitar y no avisan cuando vienen, los padres deben estar seguros de oír a sus hijos por si lloran durante la noche. Y acudir enseguida.
Atender a los niños: Los padres deben atender a sus hijos lo mas pronto posible. Los niños necesitan de ayuda y de consuelo.
Tranquilizar al niño: Los niños deben sentirse protegidos. Háblales con voz calmada y confortante y que sepan que te quedarás con él si así lo desea, pero que está bien que vuelvan a dormirse.
Quedarse con el niño: Se debe quedar con él hasta que se haya calmado y vuelvan a dormir.
Mantener la calma: Aunque sea desconcertante para los padres el ser despertados súbitamente por gritos y el llanto de sus hijos, hay que mantener la calma. Los niños notarán si los padres se encuentran nerviosos. Y no les servirá de nada. Solo los padres calmados podrán ayudar a sus hijos.
Charlar acerca de la pesadilla: Si los niños desean podréis charlar con ellos acerca de sus pesadillas. Los padres deben ayudar a sus hijos para que piensen y discutan formas de sobreponerse a las cosas que en el sueño los asustaron. Deben ayudarlos a que inventen un final feliz para el sueño.
Lo que NO se debe hacer
- No los despierte. Si los niños lloran pero todavía están dormidos no es necesario despertarlos. Debes quedarse con sus hijos hasta que despierten o se vuelvan a dormir en paz
- No los lleva a su cama. Y tampoco se suba a la cama de ellos. Esto puede dar a los niños la impresión de que deben temer a sus propias camas y darles malos hábitos.
- No les diga que las pesadillas no son reales. Tampoco decirles que fue “solo un sueño”. Lo que si pueden hacer los padres es explicarles lo que es un sueño y que todos lo tenemos.
Terrores nocturnos
Los terrores nocturnos afectan a un 3% de los niños, principalmente entre los 4 y 12 años, se resuelven espontáneamente en adolescencia. Suelen aparecer a primeras horas de la noche. El niño está agitado, llora, grita, suda y se percibe que está angustiado. En los terrores nocturnos, muy frecuentemente, el niño no recordará nada de lo que le ha causado ese malestar, por tanto no se les debe interrogar esperando que nos cuenten lo sucedido. Si insistimos no generaremos más que confusión. Hay que diferenciarlo de las pesadillas, que se producen más frecuentemente al final de la noche, y donde el niño puede contarnos lo que ha vivido en el sueño (ensueño).. Los terrores nocturnos pueden ser desencadenados por fiebre, falta de sueño y medicamentos que actúen a nivel del sistema nervioso central
Niño sonámbulo
El niño sonámbulo se levanta de su cama y permaneciendo dormido hace actividades que pueden ser habituales. La edad más frecuente de aparición es entre los 4 y 8 años y se resuelve espontáneamente en la adolescencia.. La fiebre, la falta de sueño y algunos medicamentos actúan como factores causantes. Se debe consultar para establecer estrategias que eviten riesgos en estos niños.
Niños que hablan dormiendo
La somniloquia se trata de la emisión de palabras durante el sueño. No constituye ningún problema y no requiere tratamiento.
Es normal que los niños creen un mundo paralelo al real, en donde inventan personajes, con los que muchas veces conversan. Esto es parte de su imaginación, pero para que esta imaginación se construya aún más poco a poco, es importante estimularla con los cuentos.
El hecho de contarle un cuento a tu hijo hace que comprenda cómo desenvolverse en diferentes situaciones, porque escucha atentamente las situaciones en las que se presenta el personaje de la historia, muchas veces dándoles vida en “su” realidad.
Con los cuentos, además de que tu niño va a estar entretenido, va a aprender muchas cosas de la vida, porque está en pleno desarrollo y no hay manera de que sepa de antemano asuntos del mundo de los grandes, a menos de que tú se las digas, y qué mejor que hacerlo que a través de algún cuento divertido.
Entre los más populares están La Caperucita Roja, La Cenicienta o Hansel y Gretel, incluso los de Mickey Mouse también son bastante interesantes. Los valores y enseñanzas que el niño aprende mediante el cuento son incalculables, además de las sensaciones que les transmiten.
Papá y mamá fortalecen su lazo mucho más cuando están en un momento a solas exclusivamente con su hijo con tranquilidad; así como es necesario jugar con el niño, también es básico leerle, porque además le inculcamos el hábito de la lectura desde pequeñitos.
Consejos antes de comprar un cuento y mientras se lo lees:
•Los cuentos los venden de acuerdo a la edad del niño. Un bebé necesitará cuentos con muchas imágenes y poco texto, mientras que para los niños a partir de los 2 años ya pueden interpretar mejor lo que les leas.
•El tema del cuento es igualmente importante. Lee el libro antes de comprarlo y prioriza los que se centren en valores positivos para los niños.
•Los cuentos temáticos también ayudan; por ejemplo, si los padres están atravesando por un divorcio, puedes leerle uno con tema de separación para que el niño lo vaya interiorizando de una manera sutil.
No dudes en contarle un cuento a tu bebé, incluso desde que está en el vientre materno, porque esto servirá de estimulación temprana. Cuando nazca y vaya creciendo, separa un espacio del día para su cuento diario, quizá en la noche antes de que vaya a dormir, poniéndole énfasis al texto, para que entienda mucho mejor las palabras.
Fuente:webdelbebe
Los niños tienen, muchas veces, miedo a la oscuridad. Se puede decir que este miedo es casi normal, pero se intensifica más con lo que ven en televisión y con lo que escuchan de los demás. Recordemos que los miedos son inducidos, y que ellos no nacen con esos miedos.
Existen diferentes maneras de que tu niño le reste importancia a la oscuridad. Para que poco a poco se vaya acostumbrando, te vamos a dejar algunos tips que te van a servir mucho cuando llegue la noche y toque la hora de dormir.
•Muñeco con luz
Es de noche y se te hace un suplicio dejarlo solo en su propio cuarto. Es muy sencillo ayudarlo comprándole un muñeco que tenga luz. Algunos peluches son bastante prácticos, y el niño puede encenderlos cuando tenga miedo y así la luz lo acompañará. Poco a poco se irá dando cuenta por sí solo de que no hay nada que temer.
•Luz auxiliar antioscuridad
Existen luces en el mercado que se enchufan en el tomacorriente y que automáticamente se prenden cuando la luz principal se apaga. Son súper útiles, porque acompañarán a tu hijo cuando sea la hora de dormir y no iluminan mucho, así que la luz no será nada molesta. Las de la marca Chicco son una opción.
•Compañía antes de dormir
Juega, cuéntale un cuento, rían juntos, que sienta tu cariño y comprensión. Incluso alguna técnica “espanta monstruos” tuya puede servir. Quizá ayudarlo con algunas palabras mágicas antes de dormir o con un amuleto tuyo que lo ayude a conciliar el sueño y que sirva a modo de placebo.
•Juegos en la oscuridad
Hacer sombras con las manos o simplemente jugar con las luces apagadas, le puede dar a tu hijo bastante seguridad para desenvolverse en la noche y solo. Que estos juegos sean en compañía tuya para que pueda estar siempre tranquilo. Puedes ayudarte con la luz que entra por la ventana o con una linterna.
•Stickers en la pared
Las estrellitas que se pegan en el techo y brillan en la oscuridad son perfectas para estos casos. Y no solo existen estrellas, sino miles de formas que puedes pegar también en las paredes que harán que tu hijo no se sienta solo por las noches.
•Ayúdalo a enfrentar temores
Camina con tu hijo por la habitación y revisen juntos cada rincón de la misma para que se asegure de que efectivamente no hay ningún peligro. Obvio que esto lo debes hacer con una luz auxiliar, pero nunca le prendas la luz principal si tiene miedo, debe acostumbrarse a la luz apagada siempre.
Fuente:webdelbebe
Frecuentemente cuando vemos a un niño mofletudo y rollizo nos alegramos pues pensamos que es un niño lleno de vida y feliz. nada más lejos de la realidad. Un niño obeso, rolludo, es un niño que come desordenadamente, en exceso y que como consecuencia, sufre de la llamada obesidad infantil.
La obesidad infantil es un padecimiento a nivel mundial y sobre todo en los países occidentales en donde la cultura moderna nos mete por los ojos la comida chatarra, las grasas y los dulces y golosinas.
Los niños son las víctimas más vulnerables a este tipo de comida que, ingerida en exceso, es nociva para la salud y no solo para la estética. La obesidad infantil trae graves consecuencias en el futuro, como diabetes infantil, problemas al corazón, malformaciones óseas y problemas articulares e hipertensión.
Los padres son quienes deben controlar estrictamente lo que sus hijos comen elaborando un plan nutricional que les provea de lo necesario para una buena salud. Hay que empezar por cambiar todos y cada uno de los hábitos alimenticios, evitando las grasas, frituras, embutidos y comida chatarra. Las loncheras de los niños deben prepararse en casa y no recurrir a la bodega.
En su alimentación diaria deberá haber muchas frutas, verduras, agua, carne de ave y pescado a la plancha o al horno en cantidades moderadas. Para que el niño se sienta saciado hay que darles también meriendas y tentempiés con una fruta o un vaso de yogur.
Incentivarlo a que haga deportes y se ejercite en vez de que permanezca sentado en la PC o con los videojuegos es bueno, lo ayudará a quemar las grasas. Un niño obeso puede tener problemas de autoestima, hay que ayudarle en ello en conjunto con un médico o pediatra el cual indicará un programa focalizado de alimentación y salud que elevará su autoestima.
Fuente:webdelbebe
En este artículo veremos la importancia de saber decir no a los hijos para que aprendan a conocer sus límites a tiempo y ganen en autoconfianza.
. La importancia de los límites para la educación de tus hijos
Nuestra labor como padres es la de delimitar reglas claras de conducta, límites, que ayudarán a los niños a guiarse por la vida seguros y confiados.
Hay una imagen clara que ejemplifica cómo se siente un niño que crece sin límites claros: imagínate nadando en el medio de un océano, en un lugar desde donde no atisbas tierra por ningún lado. No sabes hacía dónde dirigirte. Miras hacia un lado, miras hacia otro y todo te parece igual.
No sabes qué hacer... Esa misma ansiedad y sensación es la que experimentan los niños que no tienen reglas claras en su vida.
Imagínate por el contrario que estás en la misma situación, pero con la diferencia de que hay unos carteles indicadores que te ayudan a seguir y llegar a tierra segura.
El triángulo de responsabilidades
Imagina un gran triángulo, en el que en la base hay poca libertad, pocas elecciones posibles y poca responsabilidad y según vamos subiendo hay cada vez más libertad, más elecciones y más responsabilidad. Esto ese equivalente a cómo ha de ser la educación de nuestros hijos.
Siempre que respetemos este ritmo de crecimiento los niños se van a sentir respetados, seguros y dignos de confianza. En muchas ocasiones, sin embargo, este triángulo se invierte dándole a los niños demasiada libertad, responsabilidad y opciones demasiado pronto en la vida.
¿Resultado?: dado que han tenido padres sin saber decir no, que les han dado demasiada libertad y falta de límites desde una edad temprana, no aceptarán fácilmente cuando tengan que cumplir estos u otros límites más adelante en su vida convirtiéndose en personas con poca tolerancia a la frustración, rebeldes, y enfrentados a los adultos que les rodean.
La importancia de la constancia
Ya hemos hablado de la importancia de crear reglas claras que ayuden a los niños a crecer seguros. Pero ¿por qué hay tantos niños hoy en día que desobedecen y se saltan las normas con frecuencia?.
¿Cuántas veces nos hemos saltado una regla impuesta por nosotros mismos cediendo ante la insistencia de nuestros hijos por no saber decir no?
Un bebé, de un año, quiere coger algo que tú no le permites coger, por ejemplo un frágil adorno del salón. Él insiste en tratar de cogerlo. Unas veces, porque estás haciendo otra cosa o porque estás cansada lo dejas pasar. El niño entiende que si insiste un poco podrá obtener lo prohibido, con lo cual no está tan prohibido... O bien llora por la noche para que vayas a verle (sin que haya una razón real que lo justifique) y tú, unas veces no vas, pero otras sí.
El mensaje que le das al niño es: "Si quieres algo has de insistir mucho para conseguirlo" y también "los límites no están claros, aquí también mandas tú."
En este caso los límites no quedan claros y crean confusión y estrés en el niño. Cada vez que se enfrente a un nuevo límite lo que hará (ante tu incapacidad de saber decir no) será precisamente eso: llevarte hasta el límite!!!
Su insistencia no puede ser superior a tu firmeza
Pongamos otro ejemplo: estamos en el supermercado y de repente tu hijo de 10 años te pide que le compres un cochecito de juguete que está de moda en ese momento. Tú le dices que no y sigues caminando (con anterioridad les has enseñado a que no pidan cada vez que ven algo)
Al poco rato tu hijo se enfada: "Jo, pues fulanito y menganito lo tienen" Estoicamente tú sigues caminando y finges no escucharle y así al poco insiste, se enfada, te dice que eres mala con él y bla, bla, bla y finalmente cedes y se lo compras con la única esperanza de que se calle y deje de montarte el numerito delante de la gente.
¿Qué crees que harán esos niños la próxima vez que quieran conseguir algo que saben que no está permitido?. O bien lo harán sin más (desobedeciendo), o bien insistirán cada vez más y más para ver hasta dónde llega tu límite. Saber decir no es importantísimo.
Hazles un favor a tus hijos
Déjales claros qué es lo que está permitida a cada edad y qué es lo que definitivamente no lo está. Responsabilízales en función de su edad y vete dándoles más libertad a medida que su ritmo evolutivo lo demande.
Realmente saber decir no y ponerles límites es el mejor regalo que podemos hacerles.
Fuente:enbuenasmanos
Cómo limpiar los dientes de los niños
La salud de los dientes de los niños debe cuidarse desde el momento del nacimiento. Según informa la Academia de Odontología General, los hábitos para el cuidado de la dentadura deben empezar a desarrollarse cuando el bebé tiene cuatro meses, es decir, cuando deja la lactancia y empieza a tomar papillas y otras comidas. A partir de esta edad es cuando al niño le nace el primer diente y, durante esta etapa, el tipo de comida que consuma puede afectar a su salud dental durante toda su vida. De hecho, se ha determinado que existe una correlación entre el consumo de bebidas azucaradas durante la infancia, y el consumo posterior de alimentos con gran contenido en azúcar.
Cómo cepillar los dientes de los niños
Los niños deben limpiarse los dientes, por lo menos, dos veces al día. Conviene tomar como rutina el hábito de cepillar los dientes justo antes de ir a dormir y después del desayuno. Los padres deben enseñar a sus hijos a cepillarse los dientes como si fuera un juego, sobre todo, a partir de los dos años, que es cuando la mayoría de los dientes del niño han salido. Bajo supervisión de un adulto, puede empezar a usar una pequeña cantidad de pasta dental con flúor. Use una cantidad pequeña de pasta dental. Al principio, conviene explicar a los niños la necesidad de llevar a cabo este hábito diariamente y predicar con el ejemplo. Conviene iniciar esta rutina como si fuera un juego, enseñándole la técnica manualmente para que comprenda que es importante limpiar bien los dientes por todas sus caras, porque las bacterias son muy listas pueden formar caries en los dientes si no las eliminamos todas. Evita que tu hijo sienta que la higiene dental es una forma de castigo y procura que forme parte de una expresión más de amor que se funda con el ritual nocturno. Este método es mucho menos traumático que llevar al niño al dentista para resolver problemas que se hubieran podido evitar.
Limita el consumo de azúcar
El exceso de azúcar en la infancia puede producir dependencia en el adulto. "Los hábitos de nutrición del adulto se forman al terminar la lactancia; por eso, es tan importante que el bebé desarrolle hábitos orientados a una buena salud dental", señala Heidi Hausauer, dentista y portavoz de la Academia de Odontología General. "Se sabe que el azúcar causa caries durante toda la vida. Cuanto antes se acostumbre el bebé al azúcar, más probable será que, al llegar a adulto, se sienta atraído por alimentos con exceso de azúcar".
Caries del biberón
Los zumos de fruta, por ejemplo, tienen un alto contenido de azúcar y no deberían representar más del diez por ciento de la dieta del bebé. Sin embargo, un estudio británico muestra que el promedio de los niños ingleses sigue una dieta, cuyo 19 por ciento está formado por zumos de fruta. Los zumos de fruta pueden causar erosión en el esmalte de los dientes. Por este motivo, nunca se debe dejar que el bebé se duerma con un biberón de zumo de fruta: los dientes recién salidos terminan bañados en una sustancia que produce caries rampantes en los dientes y que puede causar la denominada "caries del biberón". "Ninguna bebida, excepto el agua, debe tomarse continuamente a lo largo del día, ni servirse más que con la comida y nunca a la hora de acostarse", señala la doctora Hausauer.
"Los niños a los que se suele administrar medicinas con exceso de azúcar a la hora de acostarse también corren el riesgo de formar caries". Estas caries no están causadas por los azúcares de forma directa, sino por los ácidos que se producen tras la ingesta alimentos azucarados y que usan las bacterias presentes en la placa o el sarro (el material blanco y pegajoso que se acumula en los dientes). El hábito de cepillar los dientes de forma regular y eficiente es la mejor solución para evitar la caries en los niños.
Fuente:guiainfantil
Cuatro de cada cien niños con edades entre 2 y 8 años roncan
El ronquido es un ruido respiratorio fuerte, rudo o agudo, que ocurre durante el sueño y se produce por la vibración de la parte posterior del paladar.
Cuatro de cada cien niños con edades entre 2 y 8 años roncan, según las últimas investigaciones. Además, uno de cada diez niños que roncan, presenta apnea del sueño caracterizada por interrupciones frecuentes de la respiración durante el sueño, según el miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, Antonio Salcedo.
Muchos adultos empezaron a roncar en la infancia, incluso desde el primer mes de vida. Si tu hijo es pequeño y empezó a roncar, es importante que escuche sus ronquidos, observe sus frecuencias, y esté pendiente de otros síntomas.
Las causas del ronquido infantil
Algunos niños roncan ocasionalmente y otros son roncadores crónicos. Las causas no están del todo definidas. Los ronquidos pueden estar relacionados con una obstrucción de la vía respiratoria alta, producida por el aumento del tamaño de los cornetes nasales. Pueden ser derivadas por un exceso de peso, lo que hace con que el tejido excesivo en el cuello presione las vías respiratorias. Pueden estar relacionados a los resfriados, o casos de alergias crónicas, y también por una inflamación de las amígdalas que provoca la obstrucción de las vías respiratorias. El uso de antihistamínicos o de alguna otra pastilla, sin la previa consulta médica, a la hora de acostarse también puede provocar el ronquido.
Las apneas del sueño
Uno de cada 10 niños que roncan, presentan apnea del sueño. Caracterizada por pausas temporales de la respiración, es una de las causas más preocupantes del ronquido. La persona experimenta periodos sin respiración de más de 10 segundos mientras duerme. Se puede repetir varias veces durante la noche. Puede provocar dificultad para comer, disminución de memoria, de habilidades y de concentración. Sin embargo, por la falta de oxígeno, los riesgos son asociados a problemas cardíacos, por lo que hace necesaria una intervención médica.
Consecuencias del ronquido infantil
En el XXI Congreso de la Sociedad Española de Pediatría Extra hospitalaria y Atención Primaria, que se celebró en Barcelona, en 2007, los expertos alertan que los niños roncadores pueden perder hasta once puntos de su coeficiente intelectual, lo que puede afectar a su rendimiento escolar . Actualmente, un 12% de los niños son roncadores y la mitad tiene incontinencia urinaria cuando duerme. Además, las apneas del sueño triplican el riesgo de padecer hiperactividad y un trastorno de déficit de atención. Otra consecuencia es el bajo peso y altura, ya que los niños sudan y consumen más calorías por la noche, por lo que fabrican menos hormona de crecimiento.
Tratamiento del ronquido infantil
Los niños que roncan tienen problemas de salud. Las apneas obstructivas del sueño alteran la vida escolar de los niños porque, entre otras cosas, les impiden concentrarse durante el día. Son niños que suelen mostrarse muy excitados, nerviosos.
El tratamiento del ronquido empieza con un diagnostico médico. Si notas que el ronquido de tu hijo persiste, no permita que esas condiciones se prolonguen más. Existe una solución y es la que te dirá el médico. Cuánto antes lo solucione, mejores resultados tendrás.
El diagnostico será dado según la edad del niño, sus hábitos, y la persistencia del ronquido. Si es algo puntual, en el caso de un resfriado o alergia, se tratará las dolencias. Si se observa que es una consecuencia de sobrepeso, se le indicará una dieta. Si el ronquido llega a interrumpir muchas las horas de sueño del niño haciendo que con durante el día el sienta somnolencia, dolores de cabeza y cansancio, se hará un estudio más profundo. Lo mismo ocurrirá si el niño presenta apnea del sueño. Ronquido crónico debe ser evaluado y tratado cuanto antes para evitar problemas de crecimiento, de aprendizaje, escolares, etc.
Fuente:guiainfantil