Por ello en esta sección brindamos aquello que debemos tener en cuenta al escoger la ropa ideal para nuestros niños, guiándonos de tres premisas básicas: La comodidad que ofrece el producto, la calidad y la temperatura o temporada.
Por ejemplo, en verano, la ropa ideal es aquella ligera, de algodón y sin mangas que a la vez le brinde comodidad al niño, que le permita moverse y desplazarse, comprarle ropa muy a su medida o ajustada hará más difícil la práctica espontánea y libre de destrezas motrices que el niño necesita desarrollar, los enterizos son los diseños prácticos e ideales para los bebés.
En invierno, se recomienda ropa acolchada o con mangas, polares, enterizos de algodón con manga larga. Especialmente cuando el niño es muy pequeño y la piel es más sensible se debe evitar ropa con lana, pues podría producir irritación.
Además de la estación del año, se debe tener en cuenta que especialmente en los primeros años, los niños crecen muy rápido, siempre es bueno comprarle ropa que pueda utilizar en los próximos meses.
Si el niño desea alguna ropa en especial, conviene llegar a un acuerdo en conjunto con los padres, esto es en el caso de los niños mayores que desean afirmar sus gustos y preferencias y es un derecho pues son ellos quienes lucirán las prendas, es conveniente que desde pequeños se les brinde opciones y vayan aprendiendo, desde pequeños, a tomar decisiones.